La pérdida incesante de población, unida al envejecimiento demográfico y a un incremento del proceso de masculinización son los obstáculos más serios para el desarrollo rural
Extremadura ha sido históricamente una comunidad poco poblada, debido sobre todo a su tendencia emigrante, más acentuada si cabe en las zonas rurales. Este hecho, unido al progresivo envejecimiento de la población rural, ha causado una profunda debilidad demográfica, más acusada en los últimos tiempos. Con el objetivo de encontrar posibles soluciones a la situación actual, así como analizar la baja ocupación espacial del territorio y el alto grado de ruralidad, el Instituto de Investigación del Patrimonio de la Universidad de Extremadura ha llevado a cabo un estudio teniendo en cuenta la perspectiva territorial de los Grupos de Acción Local, así como algunos indicadores sociodemográficos y económicos.
Tal y como indica el profesor de la UEx Felipe Leco y uno de los autores del estudio, “los Grupos de Acción Local son asociaciones sin ánimo de lucro, constituidas por los principales representantes de los intereses socioeconómicos locales, públicos y privados, que definen una serie de acciones innovadoras para el desarrollo rural de un territorio”. En Extremadura hay en la actualidad veinticuatro Grupos de Acción Local, quedando excluidos de esos grupos, Badajoz, Cáceres, Mérida y Plasencia. El resto, un total de 384 municipios, se encuentran ubicados en algunos de los 24 Grupos de Acción Local.
En la investigación, que comprende el período 2007-2014, se tuvieron en cuenta de cada uno de los Grupos de Acción Local variables como la densidad de población, la tasa de natalidad, la tasa de mortalidad, el índice de envejecimiento, la afiliación a distintos sectores económicos como el agrario, el industrial, la construcción, los servicios, etc., “pudimos comprobar cómo se comportaban dichos grupos desde un punto de vista demográfico y económico” afirma el profesor Leco.
De esta forma, se pudo deducir como existe una progresiva e incesante pérdida de efectivos demográficos, lo que revela que las políticas de desarrollo llevadas a cabo, tanto a nivel estatal como autonómico, provincial y local, han sido insuficientes como para frenar el problema de la despoblación. El investigador señala que “evidentemente, los Grupos de Acción Local que han perdido más población son los menos dinámicos desde el punto de vista demográfico y económico y, a su vez, son los que tienen menor masa poblacional. En cambio aquellos Grupos de Acción Local que tienen más población, concretamente más de 10.000 habitantes, son más dinámicos y han conseguido frenar ese despoblamiento, incluso aumentar la población en algunos casos concretos”.
El despoblamiento también es producido por el proceso imparable del envejecimiento demográfico, así como la quiebra del crecimiento natural, el incremento constante del proceso de masculinización y la superposición de flujos migratorios.
