Expertos en Extremadura debatieron ayer el cambio climático y sus efectos en el marco del programa de cultura científica “El jueves con ciencia”
El desarrollo tecnológico y la acción del hombre son responsables del calentamiento global y el cambio climático y, precisamente será la investigación y la innovación tecnológica quienes proporcionen las soluciones globales y transparentes a este problema. La educación y concienciación ciudadana son, asimismo, un pilar fundamental en la capacidad de respuesta al cambio climático. Esto es así porque el calentamiento global y sus efectos sobre la biodiversidad del planeta están sucediendo con gran rapidez. Además, sus consecuencias van a perdurar en el tiempo y son necesarias medidas inmediatas para evitar cambios irreversibles. Para ello, es fundamental que la temperatura media global no supere el límite de los 2ºC antes del año 2100.
Estas son las principales conclusiones de la tertulia con el público que protagonizaron Marcelino Núñez Corchero, meteorólogo, delegado territorial de la AEMET; José Agustín García García, catedrático y profesor del área de Física de la Tierra en la UEx, coordinador del grupo de investigación AIRE; Juan Manuel Sánchez Guzmán, profesor del área de Zoología en la UEx, coordinador del grupo de investigación Biología de la Conservación; y Eduardo Pinilla Gil, profesor del área de Química Analítica en la UEx, coordinador del grupo de investigación Análisis Químico del Medio Ambiente.
Marcelino Núñez presentó el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPPC por sus siglas en inglés), publicado en 2014. Este documento es contundente, parte de mayores observaciones y presenta mejores modelos climáticos con un amplio consenso científico. Esta evidencia científica señala que la atmósfera y el océano se han calentado. La temperatura media global ha subido casi 1ºC en los últimos 100 años y la capa superior del océano (0-700 m) se ha calentado entre 1971 y 2010. Como resultado, los volúmenes de nieve y hielo han disminuido en Groenlandia, La Antártida y el Ártico y, durante el período 1901-2010, el nivel medio global del mar se ha elevado 0,19 metros.
El cambio climático está sucediendo ya y sus efectos son a largo plazo. A modo de ejemplo ilustrativo, Núñez hizo referencia al agujero de la capa de ozono, en el sentido de que a pesar de la supresión internacional en 1994 de los gases CFC causantes del agujero de ozono, éste no se recuperará hasta el año 2075.
Las emisiones de CO2, principales responsables del calentamiento de la atmósfera
El CO2 antropogénico es el principal gas de efecto invernadero causante del cambio y del aumento de la temperatura. Así y en el marco de los dos escenarios más probables, la temperatura no supera los 2ºC en 2100, lo que implica concentraciones de CO2 por debajo de 500 ppm, o el incremento es mayor de 2ºC, y los niveles de CO2 están por encima de 500 ppm, la región mediterránea muestra una gran debilidad o vulnerabilidad. Por ejemplo en Extremadura, de acuerdo con los modelos desarrollados por la AEMET, y disponibles en su web, las olas de calor serán más intensas, llegando a durar, en el peor de los escenarios, un mes de duración.
“Si no limitamos las emisiones de carbono y antes de 2100 se superan los 2ºC de manera global, tendríamos el riesgo de no alcanzar el punto de cambio, y el deshielo en Groenlandia y la Antártida sería imparable. Muchas zonas cercanas a los deltas de los ríos quedarían inhabitables”, subrayó Agustín García García. Según el físico experto en clima, hay esperanza porque estamos a tiempo de tomar las medidas necesarias, eso sí, tiene que ser antes de 2050. En esta línea se dirige el acuerdo internacional suscrito en la Cumbre de París sobre el clima en 2015.
Además, el hombre ha alterado ciclo natural de circulación y captura del carbono. Así lo explicó Eduardo Pinilla Gil, que indicó las últimas estimaciones según las cuales, hemos alterado las reservas biológicas de carbono en tal magnitud que se emiten entre 40 y 50 veces más de carbono en forma de CO2 de lo que el planeta es capaz de volver a almacenar de manera permanente. Asimismo, un 30% del exceso de carbono en la atmósfera se absorbe por el océano contribuyendo así a su acidificación y comprometiendo la biodiversidad.
La biodiversidad, un futuro negocio en un contexto de cambio global
De acuerdo con Juan Manuel Sánchez Guzmán, el espectacular aumento demográfico de los últimos 1000 años y la presión sobre la explotación de los recursos naturales han influido notablemente en el cambio global. Para el investigador, la cuestión no es tanto la pérdida de la biodiversidad sino la velocidad a la que se están produciendo los cambios. “Cuando hay nichos ecológicos que se quedan libres no existen especies que tengan la capacidad para ocuparlos de manera suficiente”. En este contexto de cambio rápido en la biosfera, se adaptarán mejor aquellas especies con el periodo de vida más corto, es decir, los microorganismos, los virus y las bacterias. Y esto representará un auténtico problema de salud pública en el futuro.
El cambio acelerado en la biodiversidad creará un medio natural más homogéneo con pocas especies que caractericen determinadas zonas y con riesgos de invasiones biológicas. Sánchez Guzmán alertó de que la biodiversidad será un negocio para las empresas y estados que dispongan de reservas genéticas. De hecho, ya hay países que están invirtiendo mucho dinero en almacenar biodiversidad.
La mesa redonda "Cambio Climático, amenaza y desafío para la humanidad" cierra la temporada del programa "El jueves con ciencia" del Servicio de Difusión de la Cultura Científica (Gabinete de Información y Comunicación de la UEx) en colaboración con la Biblioteca Pública Bartolomé J. Gallardo.