El laboratorio de Visión Artificial y Robótica (RoboLab) de la Universidad de Extremadura, coordinado por el investigador Pablo Bustos, está trabajando en el diseño de un apartamento inteligente. Se trata de un proyecto del Programa Estatal de Investigación, Desarrollo e Innovación a los Retos de la Sociedad del MINECO, Fusión de las habilidades de navegación y manipulación para robots sociales en smart homes, que busca mejorar la autonomía de personas mayores, o con ciertas dependencias, para permitirles llevar una vida independiente más tiempo en sus hogares.

Por ahora el prototipo, compuesto por un espacio amueblado y un robot, se encuentra instalado en los laboratorios de la Escuela Politécnica de Cáceres. Con él, el grupo de  investigadores del equipo de Bustos está creando nuevas formas de interacción robot-humano en las que intervienen la transferencia de objetos entre ambos o entre lugares del apartamento, el reconocimiento de órdenes o las respuestas con voz sintética.

Es el resultado principal de una tesis de la UEx que plantea estrategias alternativas para mejorar el efecto terapéutico de las células madre adultas

 Encontrar nuevas aplicaciones en el uso de células madre se ha convertido en los últimos tiempos en un objetivo fundamental como herramienta terapéutica para el tratamiento de diversas patologías.

Una de estas aplicaciones, explica Rebeca Blázquez, autora de la tesis "Desarrollo y estudio del potencial inmunomodulador de tres novedosas estrategias para la aplicación de la terapia celular", consiste en “combinar células madre adultas con materiales utilizados normalmente en cirugía, en este caso mallas quirúrgicas, con el objetivo de evitar o al menos disminuir el proceso inflamatorio que éstas provocan habitualmente y favorecer la correcta integración del material en el organismo”. De esa manera, añade la investigadora, “a través de esta combinación, las células madre son capaces de modular la respuesta que el cuerpo tiene contra el agente extraño, de tal forma que no se produce una reacción tan exacerbada contra el paciente, disminuyendo así los efectos adversos”.

El 1 de marzo se ha dado la bienvenida al grupo internacional del Proyecto Marie Curie que visita la UEX por segunda vez. El proyecto IRNET, financiado por las célebres acciones Marie Skłodowska-Curie (IRSES programme) -en homenaje a la científica franco-polaca, dos veces galardonada con el Premio Nobel por sus trabajos sobre la radioactividad- colaboran más de diez grupos de investigación de varias universidades procedentes de Holanda, República Checa, Polonia, Rusia, Ucrania, Portugal, Australia y Extremadura. 

En esta ocasión, investigadores de Rusia, Ucrania y Polonia, con la coordinadora Eugenia Smyrnova-Trybulska a la cabeza van a pasar un mes con sede en el campus de Badajoz, pero trabajando en los  de Cáceres y Mérida, para analizar los resultados preliminares del proyecto que llega a su recta final, pues concluirá a finales de 2017. Dicho proyecto versa sobre el uso de las tecnologías en la educación superior y las tendencias emergentes en educación online para la mejora de la enseñanza a nivel global. 

Su tamaño permite la investigación con maquetas grandes en el sector de la aeronáutica y automoción

Estudiar los efectos que el viento ejerce sobre un edifico, un automóvil o un avión, son entre otras las aplicaciones del Túnel de Viento anexo a la Escuela de Ingenierías Industriales de la Universidad de Extremadura.

Gracias a esta herramienta de investigación, señala el profesor de la Escuela de Ingenierías Industriales Conrado Ferrara, “se simulan las cargas de viento que experimenta un objeto determinado en una situación real. Un ejemplo de esto es el estudio del impacto del viento sobre un edificio o un puente y es importante saber si va a afectar a la estructura de los mismos”. No obstante, añade el investigador, “depende del modelo que se ensaye, las aplicaciones son diferentes pues también podemos hacer estudios sobre efectos de galope en estructuras, sobre efectos del viento en automoción (coches de carrera), un autobús, un camión e incluso un tren”